Todo el placer de los días está en sus amaneceres.

(François de Malherbe)

¿Sientes que no te llega el día para todo lo que tienes que hacer? Seguramente te has preguntado cómo el vecino, tu colega o tu pareja pueden organizarse mejor que tú. Son puntuales, organizados y pareciera que tienen una coreografía montada sin esfuerzo. No es así, las personas organizadas han trabajado conscientemente en sus hábitos para alcanzar una rutina productiva. Aquí te compartimos algunos hábitos matutinos que te ayudarán a ser más conscientemente organizado y aprovechar el día.

Despertar temprano por la mañana

Intenta  despertarte 30 minutos antes de tu hora habitual. Si vives con más personas, no tendrás que lidiar con compartir la ducha o espacios comunes. Si vives solo, estos minutos te darán ventaja para completar tus tareas matutinas.

¡No mirar el móvil! Mantra matutino

Saca el móvil fuera del dormitorio y cualquier dispositivo electrónico que te haga caer en la tentación de conectarte. Aprovecha este tiempo desconectad@ para estirarte, hacer una pequeña meditación o ejercicios de respiración. Te vas a sentir más relajad@ y con ánimos para comenzar tu día.

Haz algo que te guste

Consiéntete y haz algo que realmente disfrutes. Termina el capítulo del libro, juega con tus hijos, escucha la nueva canción de moda y baila. Ponte un límite de tiempo, con 15 minutos basta, dejará en ti una actitud positiva a lo largo del día.

morning book

Sigue una rutina

No hay éxito sin orden, todas las personas exitosas siguen una rutina diaria. Si repites acciones con un orden específico, lo que en un principio parecía un reto se convertirá en una acción natural. Todo empieza en la mente y a fuerza de repetir el mecanismo, se acaba por volver un acto automático que el cuerpo adquiere y realiza de forma más inconsciente.

Ponte objetivos realistas

Trabaja un hábito a la vez. ¿Te apetece desayunar saludable? Elabora tu menú semanal y sé estrict@ para cumplirlo. En los siguientes 21 días que ya seas un campeón/a de los desayunos sanos, tendrás ánimo y resultados palpables para empezar con otro. Recuerda fijarte objetivos realistas y a corto plazo.

Prepara la comida antes

Es muy estresante preparar una comida por la mañana, tu cabeza ya está a mil por hora entre los pendientes del día en el que estás. Procura hacer una noche anterior tu comida o si te organizas puedes preparar comida los fines de semana, así ahorras tiempo y también dinero. Si tienes hijos, planifica las meriendas que se llevarán al cole y tenlas previstas.

Ordena tu casa

Antes de salir, ordena tu casa. A nadie le apetece llegar después de una jornada laboral a recoger el baño, lavar los cacharros o hacer la cama. En cambio si tu casa está en orden, te sentirás más a gusto en casa y relajado, como consecuencia serás más productivo. Recuerda que no hay bienestar sin salud mental.

Haz la tarea que menos te gusta primero

En vez de alargar el tiempo para completar esa tarea que tanta pereza te da, termina con ella lo antes posible. ¿Tenéis que limpiar la arena del gato? ¿Sacar la basura? Hazlo cuanto antes y olvídate de ella durante todo el día.

Es más sencillo ser ordenado con una disciplina diaria. Aprovecha la mañana, experimenta nuevas maneras de comenzar tu día.